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11 de febrero de 2013
15 de enero de 2013
12 de enero de 2013
3 de enero de 2013
14 de septiembre de 2012
10 de septiembre de 2012
1 de septiembre de 2012
Cascabel o no cascabel, esa es la cuestión (N° 291)
Es un gato ya maduro, y de aspecto salvaje aunque esté doméstico y tenga un cascabel ¿Qué peor castigo para un gato que ponerle a sonar, y quitarle la posibilidad de ser sigiloso, de esconderse y observar? Cada persona que tiene gato puede optar a hacerlo o no, pero yo personalmente preferiría dejarlo libre como el viento, quizá con una cinta en su pata, o algo que evidencie que volverá a mi casa luego de su gran jornada. En este país las leyes no obligan a poner collares ni nada de eso... quizás bueno quizás malo.
Esta es la imagen número 291, perteneciente al 1 de Septiembre de 2012. El mes de los gatos ya pasó, pero nos ha dejado un legado ¡La cuarta camada debería ya haber aparecido en forma de células, las que se dividen cada vez más rápido!
28 de agosto de 2012
Complacido con todo (N° 287)
Es un felino que se encuentra muy plácido y complacido en medio de las hojas y la tierra. Él no necesita mayores comodidades, y parece un buen sitio para descansar luego de una jornada a pleno sol. Todo lo que un gato siempre soñó estuvo afuera, y las casas sólo son preocupaciones para nosotros las personas. Él podría haber vivido su vida entera cazando pajarillos, roedores veloces y buscando otros seres gatunos con los que interactuar. Ahora no, porque creemos que somos dueños de ellos.
Esta es la foto número 287, perteneciente al día 28 de Agosto del año 2012, es decir, de ayer. Mañana publicaré la de hoy y la de mañana, y todo volverá a la normalidad.
PD: Creo que no pudiste evitar leer "complácido" en vez de "complacido" ¿Cierto? A casi todos les pasa.
24 de agosto de 2012
El gato y la naturaleza (N° 283)
Este es un gato aventurero que está atravesando un pastizal muy espeso, poblado de arbustos extraños y ramas delgadas. El gato pasa por debajo de ellas hacia su objetivo, sin ninguna preocupación. Si él fuera un humano atravesando el mismo lugar, se preocuparía de no enbarrarse las zapatillas, de sacar la mejor de las fotos, de que se está haciendo de noche, de que ya le está dando hambre, que no hay un baño ni tiene papel, y que los insectos le molestan. Casi siempre los humanos se inventan del sombrero de un mago preocupaciones sin importancia, y no se dan el tiempo para mirar a su alrededor, y ver pasar al gato, incólume, por debajo de las ramas.
Esta es la imagen número 283, perteneciente al día 24 de Agosto de 2012. Cuando el gato llegue a destino, por fin se preocupará de descansar. Él disfruta el viaje, no sólo el momento de la llegada.
9 de agosto de 2012
Humanizar a la mascota (N° 268)
En una muestra de ternura felina estos dos gatos parecen querer darse un beso, y es entonces cuando yo les recuerdo que las expresiones de los demás mamíferos son diferentes a las nuestras, y habrán puesto sus hociquitos cerca por algún otro motivo. Humanizar a las mascotas no es muy bueno, ya que les conferimos atributos y capacidades que no tienen, los idealizamos, y es así como ellos demuestran menos de lo que nosotros en nuestra mente esperábamos. A los gatos hay que quererlos por lo que son, no por cómo nos esperamos que sea.
Esta es la imagen número 268, perteneciente al día 9 de Agosto de 2012. Sin humanizar una mascota, las expectativas falsas se esfuman y llega el real disfrute.
5 de agosto de 2012
Cuesta arriba (N° 264)
Estoy 50% segura de que este no es un camino cuesta arriba, tan sólo que la fotografía está tomada con una inclinación. No obstante, el efecto es muy bueno, puesto que el pasto está reclinado en sentido hacia la supuesta caída, y el gato también coopera en ello, dando la impresión de que el terreno está desnivelado.
Si resulta ser de veras una cuesta arriba, pues mi descripción de la imagen se va cuesta abajo.
Esta es la imagen número 264, del día 5 de Agosto de 2012. Tengo pensando un especial de gatos, ya que hace tiempo no hacía ninguno. Tendrá tantos felinos que lo publicaré en primera y segunda parte, con algunos días de diferencia.
4 de agosto de 2012
Lo que es real (N° 263)
El gato tuvo que haber bebido un poquito de agua de aquella fuente en miniatura, refrescándose del inmenso calor que producen los focos dentro del estudio fotográfico. Realmente no soy entendida en el tema, pero la luz parece poco natural, y me es más fácil pensar que está en interiores, debidamente adornado; la prueba es el reflejo perfecto de las flores en el agua. Además, la puesta en escena es obvia.
¿Por qué hago esto, y mato la magia? No lo sé, tal vez me equivoque y eso sea un jardín muy bonito, y el gato llegó al lugar adecuado en el momento justo. Esta es la imagen número 263, perteneciente al día 4 de Agosto de 2012. Tal vez la magia pueda vivir, bajo la ilusión de que ese lugar existe y que el gato bebe agua de ahí cada día.
29 de julio de 2012
Fuera de foco (N° 257)
La foto está desenfocada en el rostro del gato, pero aun así la incluyo, puesto que es parte de la actividad diaria de este gato el caminar encima de troncos cortados. Hace poco eso era un árbol, pero llegó el humano facineroso a cortarlo en pedazos para hacer muebles donde los gatos saltan y se suben. Eso es un actividad diaria de los hombres, mientras que el gato observa lo que está pasando, y calcula que quizá no esté bien. Se sube al tronco pensando en lo grande y esbelto que era como árbol, y se da cuenta quién está desenfocado de verdad.
Esta es la imagen número 257, perteneciente al día 29 de Julio de 2012. Ese tronco no durará para siempre, y al pudrirse dará habitat a insectos, continuando el ciclo de la vida.
22 de julio de 2012
Blanquito y redondo (N° 250)
Esto es lo que le puede pasar al papel higiénico si en nuestros hogares no hay algo que distraiga al gato, tenemos que centrar la atención del felino en otra cosa, porque si no enfocará su energía en cosas que a nosotros nos parecerán destructivas. El gato en ningún caso tuvo una maldad y/o alevosía, él simplemente vio el rollo de papel, tan redondo y blanco que decidió ponerse a jugar. Vio que era suavecito, y clavó sus garras con su consiguiente destrucción.
Así que la culpa no es del gato, es del humano que no le da algún otro pasatiempo, o le enseña que no debe hacer eso. A nuestros gatos no les pasa eso, porque salieron todos a viajar por el mundo. Los poquitos que se quedaron, reciben la ayuda de nuestros nuevos amigos:
Él va a reponer todos los rollos de papel higiénico destruidos, en lo que yo enseño a los gatos que no deben destrozarlos. Va a tardar algo de tiempo, pero finalmente ya no tendremos ese problema.
Este es el grupo de imágenes número 250, perteneciente al día 22 de Julio de 2012. Guardaré todos esos trocitos de papel roto y si es que se me da por celebrar navidad, lo pondré echo pelotitas como si fuera nieve. Un irreal árbol navideño nevado en la época de primavera. El hemisferio sur funciona al revés.
15 de julio de 2012
Gato temerario (N° 243)
Él se pone en la baranda de la terraza de algún apartamento a varios pisos de altura. Algunos humanos sentirían vértigo sólo de estar ahí, pero el gato es el equilibrio convertido en animal, así que él no siente ningún nerviosismo. Sí lo sintiera, me encontraría preocupada, pero en realidad él puede pasear tranquilo. Lo que sí, esta foto parece no tener flash y eso en esta situación es muy prudente ¿Qué tal si el gato se hubiera sorprendido de la luz, o encandilado? Eso si hubiese sido peligroso. De cualquier modo, este gato ahora está bien, disfrutando de pasear en lugares donde las personas no pueden llegar.
Esta es la imagen número 243, perteneciente al día 15 de Julio de 2012. Puede que los gatos no tengan 7 vidas, pero saben donde están sus límites.
13 de julio de 2012
Un gato normal (N° 241)
Esto es sencillo: un gato sobre una piedra. Es un gato común y corriente, para recordarnos un poco que aquí siempre muestro los mejores felinos, pero todos tienen su espacio. La realidad de nuestras mascotas es diferente de la que yo muestro aquí, y cada uno debe ser muy feliz con su gato, sea del color que sea, o sea lindo o feo (aunque gatos feos nos existen).
Esta es la imagen número 241, perteneciente al día 13 de Julio de 2012. Este gato se irá a pasear por ahí, y se topará con más gatos tan normales como él.
12 de julio de 2012
Sonrisa o no sonrisa (N° 240)
Me gusta este tipo de fotos donde los gatos muestran una sonrisa. No obstante, no es la primera vez que digo que esa es sólo una similitud con una expresión humana que podemos considerar de felicidad. Los gatos no sonríen, y no muestran lo contentos que están de ese modo. Tal vez este gato se echó algo amargo y es una expresión similar a la nuestra al comer limón, pero no lo sé; también puede ser un maullido tomado en el momento perfecto. Las motivaciones de este gato para poner esa cara no son necesariamente felices.
Esta es la imagen número 240, perteneciente al día 12 de Julio de 2012. Quizá el gato si esté contento, y todo este monólogo no tiene sentido.
7 de julio de 2012
Hacia el horizonte (N° 235)
Los gatos descansan luego de una jornada de caminata. Ellos no están interesados en la reja, pues pasan por abajo con facilidad, y sólo dejan el mar en el horizonte. A lo lejos se ven los edificios, pero eso es a kilómetros y kilómetros de ahí. Los gatos algún día llegarán a ese lugar recóndito, y a través del mar mirarán al edificio de esta reja nada más que como un punto difuso. Es el paso del tiempo, que hace que el horizonte se vuelva realidad, y que lo que una vez fue la realidad, quede perdido atrás. Sólo queda recordar el día en que iban y venían por debajo de la reja, sin preocuparse de nada.
Esta es la imagen número 235, perteneciente al día 7 de Julio de 2012. Esta entrada va a quedar atrás, y pronto ya no se acordarán de ella. Luego seré yo quien olvidé que un día escribí estas cosas.
27 de junio de 2012
Eso quema (N° 225)
Este gato fue osado y se subió en una parrilla atraído por el olor de la carne. Como es un gato aventurero, simplemente dio un salto y vio si había algo interesante que degustar.
No obstante fue un gato afortunado. Puede suceder perfectamente que el gato salte y la parrilla todavía esté caliente, lo que le ocasionará una quemadura. Los gatos observan y ven que podría estar caluroso, pero no si saltan desde un techo o un muro lejano. Será en el aire cuando comprendan que eso les va a quemar, y ya no podrán hacer nada.
Así que ud. si hace un asado asegurese de que eso no pase. Ya no hay más carne y el carbón ya se utilizó ¿Por qué no le echa agua y así asunto arreglado? Los gatitos se lo agradecerán.
Esta es la imagen número 225, perteneciente al día 27 de Junio de 2012. ¡Ya es la mitad del año! Esto se pasa volando, pronto será 2013.
22 de junio de 2012
Frutilla de la amistad
Hace dos días fue que por fin un gato logró encontrar al ratón que andaba merodeando. Sorprendentemente lo que atraía la atención de todos los gatos no era el roedor en sí, sino que la frutilla que este andaba llevando de un lado para otro, ya que no es algo que ven todos los días. Aquí están las imágenes que demuestran lo que ocurrió:
Primero el roedor comienza a comer de la frutilla sin importarse del gato. No le tiene miedo, y veremos que tampoco tenía razones para tenerlo. El felino mira la frutilla atentamente, y su lengua demuestre el interés que tiene en ella.
El ratón decide convidarle de su fruta roja y el gato rapidamente intenta probarla. No estoy segura de que una frutilla no le vaya a caer mal al estómago a un felino, así que ud. no lo intente en casa. Un gato es un ser carnívoro, y esa es la razón de que el ratón esté tan confundido: ahora no se lo están tratando de comer.
Por motivos inherentes a la trama y el argumento, aparece de la nada otra mitad de frutilla perfectamente cortada, así que ahora ambos pueden compartir ese momento sin sentir que uno le está quitando al otro. Quizás el gato se haya dado cuenta de que una frutilla no es alimento para él.
Finalmente no la come, pero agradece al ratón por ser tan amistoso. No tengo idea cómo es que pueden hablar entre ellos, ni cómo es que el segundo gato saca las fotos, mejor preguntenle al doctor Dolittle o a alguien de por ahí. La moraleja de esta historia es que ud. no debe darle a comer cosas desconocidas a un gato o a un perro, ya que sus fisionomías son diferentes. Hay cosas que están terminantemente prohibidas en un gato, como los chocolates y las aspirinas, ¿Pero y una frutilla? Es natural y parece inofensiva ¿No? Aún así yo no me arriesgaría. De partida, en estas épocas es difícil hablar de algo "natural" al pie de la letra. Por otro lado, insisto en que los gatos originalmente come carne, y digerir frutar y verduras en una labor mucho más compleja, y si no queremos enfermar al gato, mejor prevenir antes que curar.
Saludos.
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