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22 de junio de 2012

Frutilla de la amistad

Hace dos días fue que por fin un gato logró encontrar al ratón que andaba merodeando. Sorprendentemente lo que atraía la atención de todos los gatos no era el roedor en sí, sino que la frutilla que este andaba llevando de un lado para otro, ya que no es algo que ven todos los días. Aquí están las imágenes que demuestran lo que ocurrió:


Primero el roedor comienza a comer de la frutilla sin importarse del gato. No le tiene miedo, y veremos que tampoco tenía razones para tenerlo. El felino mira la frutilla atentamente, y su lengua demuestre el interés que tiene en ella.


El ratón decide convidarle de su fruta roja y el gato rapidamente intenta probarla. No estoy segura de que una frutilla no le vaya a caer mal al estómago a un felino, así que ud. no lo intente en casa. Un gato es un ser carnívoro, y esa es la razón de que el ratón esté tan confundido: ahora no se lo están tratando de comer.


Por motivos inherentes a la trama y el argumento, aparece de la nada otra mitad de frutilla perfectamente cortada, así que ahora ambos pueden compartir ese momento sin sentir que uno le está quitando al otro. Quizás el gato se haya dado cuenta de que una frutilla no es alimento para él.


Finalmente no la come, pero agradece al ratón por ser tan amistoso. No tengo idea cómo es que pueden hablar entre ellos, ni cómo es que el segundo gato saca las fotos, mejor preguntenle al doctor Dolittle o a alguien de por ahí. La moraleja de esta historia es que ud. no debe darle a comer cosas desconocidas a un gato o a un perro, ya que sus fisionomías son diferentes. Hay cosas que están terminantemente prohibidas en un gato, como los chocolates y las aspirinas, ¿Pero y una frutilla? Es natural y parece inofensiva ¿No? Aún así yo no me arriesgaría. De partida, en estas épocas es difícil hablar de algo "natural" al pie de la letra. Por otro lado, insisto en que los gatos originalmente come carne, y digerir frutar y verduras en una labor mucho más compleja, y si no queremos enfermar al gato, mejor prevenir antes que curar.

Saludos.

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